Formato: FLAC
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Aquel oscuro trabajo del caserón de El Espinar hecho a principios de 1973, cristaliza al año siguiente en este long play con el que EMI apuesta con todo su aparato por este dúo de buenas voces, aires de folk intimista y composiciones cargadas de ese costumbrismo casticismo mamado en El Rastro, del que toda su vida han sido vecinos.
Además de “La mujer de cristal”, que ya había aparecido en single y era el mascarón de proa de su primera incursión musical, el disco grande contenía otros temas tanto o más interesante que retratan distintos arquetipos sociales intemporales. Entre las canciones más destacable encontramos “Solterías” -que bien podría titularse Solteronas-, que nos fotografía el paseo festivo de las aspirantes a buscar marido con ajuar y sin novio: “Van caminando con paso casi militar el camino que un día recorrieron sus mamás”. “Mi escuela”, uno de los primeros temas compuestos por el dúo es un canto a las viejas escuelas de calles estrechas, polvo en los pupitres y el retrato de un señor condecorado. Allí pasaron su niñez toreros, políticos, abogados y Víctor y Diego que vuelven la vista con ternura hacia su umbría escuela de mediados de siglo. Mucha gente, para bien o para mal, hemos conocido una escuela así; generalmente para mal.
“Consejos” es uno de los buenos temas de este LP, en el que nos muestran una vena de crítica positiva en la que enhebran una sarta de consejos más o menos tópicos tendentes a respetar a los demás como primer paso para respetarnos a nosotros mismos. En la misma línea, “Escúchate” es una sacudida que apela a tomar las riendas de nuestra propia libertad. Destacables arreglos e instrumentación, incluyendo un breve solo de oboe los de esta canción.
Elaborada percusión de romería para “En el día de la fiesta”. El tema más rítmico de todo este álbum con una instrumentación encomendada a una formación electrificada. Sobre gustos no hay nada escrito, pero a un servidor es el tema que más le gusta de este LP de presentación de Víctor y Diego. Postre costumbrista para cerrar con la glosa de este personaje antes habitual, ahora ya prácticamente desaparecido de los paisajes urbanos: “El afilador” con su flauta y su rueda cargada de chispas de Vulcano.
Este blog es uno de los más deliciosos sitios que he encontrado. Esmerada y excelente selección y en ¡flac!. Mi más sincera enhorabuena y agradecimiento. Grupos, solistas y dúos como Víctor y Diego, geniales, eran escuchados cuando empezaba mi juventud. Gracias de nuevo y mis mejores deseos.
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