Live in Germany es el título de un álbum en directo del grupo español de rock Héroes del Silencio, publicado el 22 de noviembre de 2011, quince años después de la separación del grupo.
El disco, publicado en los formatos CD + DVD, vinilo y en línea, recoge una actuación en directo del grupo en la sala Gin Club Rock de Coblenza (Alemania) en 1993.
El concierto de Coblenza se celebró el 2 de octubre de 1993, año en que Héroes del Silencio llevaron a cabo una extensa gira por Europa, y fue grabado por las cámaras de la cadena de televisión alemana SWF3.
La gira servía como presentación a nivel continental del álbum El espíritu del vino, por lo que la mayoría de los temas interpretados correspondieron a este álbum.
Debido a su emisión por televisión, rápidamente se convirtió en una de las grabaciones piratas más conocidas de la banda, gracias a su calidad de sonido e imagen.
Enrique Bunbury ha llegado a afirmar que “Mar adentro” es la mejor canción que Héroes del Silencio ha grabado nunca. Quizá por eso, y sin poder ser de otra manera, encabeza su primer álbum, “El Mar no Cesa” (EMI, 1988), como una especie de estandarte (o mejor dicho en su caso, una punta de lanza).
Efectivamente el tema define a la perfección las intenciones del grupo: pop-rock con reminiscencias oscuras (por el lado pop Echo and the Bunnymen o The Cure, y por el lado rock The Sisters of Mercy o Fields of the Nephelyn), actitud desafiante en las letras (pero no exenta de lirismo) y multitud de referencias y metáforas: el mar como sexo y el sexo como libertad.
Esa forma de cantar de Enrique de “comerse el mundo” (como les dijo una periodista de la época) y la inconfundible guitarra de Juan Valdivia, siempre en la justa medida de lo épico y lo íntimo (de nuevo pop y rock majándose a palos), definirían el sonido Héroes, a la que habría que añadir la batería intuitiva y enérgica (muy en sintonía con esa épica) de Pedro Andreu y el efectivo bajo de Joaquín Cardiel.
Es curioso escuchar “El Mar no Cesa” teniendo en cuenta en lo que el grupo se estaba convirtiendo a pasos agigantados ya desde la publicación de su maxi-single “Héroe de Leyenda” (EMI, 1987), y, sobre todo, lo que llegaría a ser.
Nadie en España cantaba como Bunbury (con la excepción de Bambino y otros maestros del arrebato), quien imponía su voz y sus metáforas antes que la ironía y elegancia pop de otros artistas españoles de los 80 (el combo Berlanga-Canut, Jaime Urrutia…). Quizá por eso el grupo estaba componiendo himnos, más allá de su voluntad. Aunque un grupo llamado “Héroes del Silencio” posiblemente no aspirase a otra cosa.
Si bien gracias a “El Mar no Cesa” (EMI, 1988) Héroes del Silencio habían comenzado una meteórica ascensión dentro del panorama rock nacional que en poco tiempo se les escaparía de las manos, es bien conocido que no estaban muy satisfechos con el resultado.
No tanto con las canciones como con el sonido, ese que, según ellos, sí conseguían en lo alto de un escenario.
Para paliar eso se editó sólo un año después un disco en vivo, “En Directo” (EMI, 1989), que recogía ese sonido más crudo del que el grupo hablaba. El siguiente paso no podía ser otro que un segundo trabajo acorde con esta actitud.
Y para ello necesitaban a un productor que les entendiera y plasmase sus deseos en la mesa de mezclas.
Ese productor fue el mismísimo Phil Manzanera (mítico guitarrista de los míticos Roxy Music). Manzanera y Héroes hicieron buenas migas, tantas que el resultado fue posiblemente el mejor disco de la historia del grupo (para ellos y para los fans).
O por lo menos el disco más “Héroes”, ya que aunque “El Mar no Cesa” apunta ese sonido deseado, no acaba de conseguirlo. Además pasa por el necesario estado del “disco adolescente” (o por lo menos en su equivalente para Héroes del Silencio), con letras un tanto ingenuas (insistimos, para lo que serían Héroes del Silencio).
30 Frases de Héroes del Silencio y Enrique Bunbury
1. No sé distinguir entre besos y raíces. No sé distinguir lo complicado de lo simple. Y ahora estás en mi lista de promesas a olvidar. – La chispa adecuada
2. Siempre en la oscuridad, la voz no tiene sentido. El silencio lo es todo, héroe en su propio olvido. En sus ojos apagados hay un eterno castigo, el héroe de la leyenda pertenece al sueño de un destino. – Héroe de leyenda
3. Con los brazos de la fiebre que aún abarcan mi frente lo he pensado mejor y desataré las serpientes de la vanidad. El paraíso es escuchar, el miedo es un ladrón al que no guardo rencor y el dolor es un ensayo de la muerte. – En brazos de la fiebre
4. No se puede encerrar el sol bajo una campana, no se puede aplazar la hora señalada. – Morir todavía
5. Te he dicho que no mires atrás porque el cielo no es tuyo y hay que empezar despacio a deshacer el mundo. – Deshacer el mundo
6. Las distancias se hacen cortas, pasan rápidas las horas. Y este cuarto no para de menguar. – Maldito duende
7. Y duerme un poco más, los párpados no aguantan ya. Luego están las decepciones, cuando el cierzo no parece perdonar. Sirena, vuelve al mar, varada por la realidad. Sufrir alucinaciones cuando el cielo no parece escuchar. – La sirena varada
8. Que termine un momento precioso y le suceda la vulgaridad, y nadar mar adentro y no poder salir. En la prisión del deseo estoy junto a ti. – Mar adentro
9. Larguémonos, chica, hacia el mar. No hay amanecer en esta ciudad, y no sé si nací para correr pero quizás sí que nací para apostar. – Apuesta por el Rock n’ Roll
10. Descreo de la razón de la mayoría y sus abrazos propietarios. Sin salida, no hay salida. Ahora que padeces de insomnio, quisieras morir de siesta. – Iberia sumergida
11. No encuentro palabras para decirlo y a veces siento que el pensamiento es un idioma de signos… – Flor venenosa
12. Cegados por la voz de la inexperiencia, nos arrastramos sin pensar. A lomos del desierto hacia las cavernas, las huellas del peregrino me guiarán. – Los placeres de la pobreza
13. Dejo en tus manos lo que hemos acordado; la lluvia de hace un rato. – Con nombre de guerra
14. Nunca fue tan breve una despedida, nunca me creí que fuera definitiva. Nunca quise tanto a nadie en mi vida, nunca a un ser extraño le llamé mi familia. – Flor de loto
15. Apenas afino melodías de perdedor, los cielos han gastado mi último suspiro, quedaron atrás todos los enemigos y aún queda la duda de un futuro mejor. – El camino del exceso
16. Y no hace mucho que rompí tu recuerdo pensando acabar de una vez. Pero el tiempo y la distancia no son todo para mí, siempre hay algo que me hace volver. – La carta
17. Una mala borrasca me hizo buscar un poco de calma en un sueño a escondidas. – Fuente esperanza
18. Tengo momentos en que sólo recuerdo una conversación, quizás sólo fueron palabras desnudas, pero de corazón. – Hace tiempo
19. Como un rayo de luna sobre los mares pasa por el abismo de mis miserias, como si fuera verdad que mi debilidad le alimentara y fortaleciera. – Virus
20. Ponme fuera del alcance del bostezo universal. Nos veremos en el exilio o en una celda. Ponme fuera del reposo en mi historia personal. Soy un ave rapaz, ¡mirad mis alas! – Deshacer el mundo
21. Encerrado en el tiempo ha perdido el valor para poder escapar de su celda, el héroe sin ilusión. – Héroe de leyenda
22. Amanecí con los puños bien cerrados y la rabia insolente de mi juventud. La ingenuidad nos absuelve de equivocarnos. – Ibera sumergida
23. He de encontrar una senda que me lleve a un lugar y no me siento capaz de iniciar nueva vida sin más. – Senda
24. Alguien jodió las calles con prohibiciones de quien iba a entrar. Quien separó los colores, fabricó las casillas que has de ocupar. – Babel
25. ¿Cuál es el punto en que coinciden lo increíble y lo exacto? La experiencia es la evidencia y las cuestiones mi fortaleza. Lo cotidiano ya no es real, o eso al menos quisiera… – Derivas
26. He oído que la noche es toda magia y que el duende te invita a soñar. – Maldito duende
27. Siempre es la misma función, el mismo espectador, el mismo teatro, en el que tantas veces actuó. – La herida
28. Pierdo el tiempo pensando en lo esencial que a veces dejo pasar. ¡Cuántos instantes he ignorado ya capaces de haberme cambiado! – Oración
29. Mis ojos van al cuadro, algo se ha iluminado. Y en su interior las figuras danzan, me miran fijamente y se agradan. Mi cuerpo pesa menos, siento que me elevo. – El cuadro
30. Te imaginas cosas que nunca verás, a veces piensas que son reales. Imágenes que los demás no oirán porque son hologramas sin proyección. – Hologramas
Grupo de rock con influencias pop y góticas, uno de los pocos "de masas" que ha dado este país, con gran éxito también en Europa y América
¿Cómo hace uno para escribir sobre Héroes del Silencio
sin pasar por lugares comunes? ¿Sin decir cosas como “o se los quiere o se les odia, no hay punto medio”? Aunque esta última frase tiene su punto de razón. Los fans de Héroes lo son hasta la última consecuencia y no entenderán ni por asomo que haya también una legión de detractores que echan pestes de los aires de grandeza de los maños.
Al margen de filias y fobias hay una serie de datos sobre el grupo que son inamovibles (esto es: objetivos).
Ningún otro grupo ha arrastrado consigo tal devoción y fanatismo en este país, hasta el punto de existir tantos discos piratas y bootlegs de Héroes del Silencio como de otros llenaestadios de finales de los 80 tipo Depeche Mode o U2 (apenas seguiremos con esta odiosa comparación en la que plumillas de toda índole y nacionalidad llamaban a nuestros Héroes los “U2 españoles” o, en un alarde de mal gusto “U3”). También es de rigor decir que Héroes de Silencio sí conquistaron el duro mercado europeo (sobre todo Alemania) y el (no tan duro) mercado latinoamericano. Todo esto con un planteamiento alejado de las propuestas españolas más vendibles en el extranjero (los pastiches latinos) y siempre cantando en castellano.
En 1985 y tras el paso por varios combos (Proceso Entrópico, Tres de Ellos, Edición Fría y Zumo de Vidrio) se consolida la formación definitiva del grupo: Enrique Bunbury (voz), Juan Valdivia (guitarra), Pedro Andreu (batería) y Joaquín Cardiel (bajo). Ya la elección del nombre tiene cierto halo de leyenda, al parecer fue hecha a última hora en la puerta de un estudio de radio. Ese año el grupo realiza un gran número de conciertos en los que van aumentando su fama. No obstante, telonearon a grupos españoles (El Último de la Fila, Puturrú de Fuá, 091, La Unión) e incluso artistas extranjeros como Alphaville o el propio Franco Battiato.
Dos años más tarde EMI recibe una maqueta del grupo. La discográfica había hecho un seguimiento de la trayectoria de Héroes del Silencio y pensaba que tenían mucho potencial. Aun así el sello pone el grupo a prueba. Antes de realizar cualquier LP han de grabar un maxi-single y vender más de 5.000 unidades. Así se edita “Héroe de Leyenda” (EMI, 1987), su primera referencia. El sonido es muy claro: notorias referencias inglesas (la canción homónima recuerda en sus percusiones peligrosamente al “Play for today” de The Cure) sin renunciar al sonido, digamos, más latino.
Las ventas superan las 30.000 copias, por lo que el año siguiente se graba el primer LP del grupo, “El Mar no Cesa” (EMI, 1988), que contiene dos de los temas del maxi (“Heroe de leyenda” y “La lluvia gris”), y que mantiene ese sonido marcadamente post punk (no sería muy arriesgado hablar de la influencia de Johnny Marr y Morrissey en Juan y Enrique, respectivamente, aunque este último siempre ha tenido más cerca la sombra de Bowie… y de hecho aún no se ha librado de ella).
Aunque “El Mar no Cesa” incluye muchas de las mejores canciones que el grupo ha grabado nunca (hablamos de “Mar adentro”, “Flor venenosa”, o incluso la agridulce “Hace tiempo”), los resultados no son del gusto de todos.
Si bien Héroes nunca renunciará al pop (que no tiene por qué estar reñido con la dureza) son, en esencia, un grupo de rock, tal y como sabían los muchos seguidores que ya tenían antes de editar ningún trabajo. El sonido del disco, pues, no satisface del todo al grupo. Lo encuentran sobreproducido y en él no ven su verdadera esencia. Por eso, no tardan en grabar precisamente un EP en vivo,“En Directo” (EMI, 1989), que servirá de antesala a su próximo proyecto.
Para que esto ocurra necesitan a alguien de confianza en la mesa de mezclas.
Y lo encuentras en el mítico guitarrista de los míticos Roxy Music, Phil Manzanera. ¿Cómo no va a confiar uno en el tipo que tocó ese abrasivo solo de guitarra en “Baby’s on fire” del primer disco en solitario de Brian Eno?. (Nota para plumillas: ¿alguien se dio cuenta que mientras un ex-Roxy Music producía la época de oro de U2, otro estaba a punto de hacer lo mismo con Héroes del Silencio?. ¿O es mejor ver las cosas simplemente como son?: “creemos que sí”).
La comunicación con Manzanera fue total y el resultado el buscado. “Senderos de Traición” (EMI, 1990) es la obra de la que más satisfecho está la banda. No sólo a nivel compositivo (el LP abre con sus dos canciones más conocidas, las que además les llevaron al éxito masivo) sino además en el sonido (aunque tiene esas influencias siniestras, es un disco de rock) y en el lírico (las letras de Bunbury tienen un contenido más sólido, aunque cada vez son más oscuras y difíciles). El éxito les lleva a Sudamérica y a Europa (que, como todo el mundo sabe, siempre ha estado más lejos que América para los artistas españoles), sobre todo a Alemania.
Tras un nuevo disco en directo, “Senda 91” (EMI, 1991), tres años después repiten con Manzanera como productor para su tercer álbum. “El Espíritu del Vino” (EMI, 1993) ahonda en el lado más rockero del grupo (cosa que se ve en las intenciones de Juan Valdivia), tal y como se aprecia en el primer single, “Nuestros nombres”, con un riff de guitarra pesado y marcadamente siniestro. El disco es fiel a aquella famosa máxima de Blake (“El camino del exceso conduce al palacio de la sabiduría”) y cuenta con una producción más elaborada, además de unos temas mucho más ambiciosos, en forma y contenido. De hecho, hasta habría que decir que el libreto del CD es enorme: no obstante, todas las letras están traducidas al inglés.
Precisamente con el nombre de Camino del Exceso inician una mastodóntica gira por Europa y América en la que contarán con un segundo guitarrista, Alan Boguslavski.
Tras el fin de la gira y un breve descanso el grupo se embarca en lo que será su último disco de estudio. En “Avalancha” (EMI, 1995) prescinden de Phil Manzanera y abrazan definitivamente el hard rock. No obstante, el productor elegido es Bob Ezrin con quien, entre otros, KISS y Alice Cooper grabaron sus mejores discos. Escuchar “El Mar no Cesa” y “Avalancha” seguido es un curioso experimento. Aunque el sonido no tiene absolutamente nada que ver queda muy claro que se trata del mismo grupo.
Un grupo que ha llegado al punto más alto de su evolución siendo fieles a sí mismos. Si el disco de 1988 tenía innegables regustillos latinos, el de 1995 es eminentemente americano (quizá con la excepción de “Opio”) con dejes orientales que ya habían adquirido con “El Espíritu del Vino”, y que Bunbury continuaría desarrollando en su carrera en solitario. Tras la pertinaz gira se edita un doble CD en directo “Parasiempre” (EMI, 1996), y anuncian su separación.
Tras ello, aparte de ediciones de grandes éxitos y otros menesteres –“Rarezas” (EMI, 1998), “Canciones 84-96” (EMI, 2000), “El Ruido y la Furia” (EMI, 2005)– salvo Joaquin y Juan (que tuvieron incursiones musicales muy puntales), no se han estado quietos.
Pedro formó el grupo Puravida (donde cantaba y tocaba la guitarra) y el proyecto DAB. Enrique Bunbury, como bien es sabido, ha sido el que mejor ha sabido reconducir su carrera en solitario creando un corpus propio alejado del de Héroes: electrónica, rancheras, coplas, todo ello supeditado al rock, claro.
Pero como suele ocurrir con estos “grupos míticos”, en el mismo momento en que se separan empiezan las especulaciones de un posible regreso.
Al igual que ocurrió con muchos otros este se dio en forma de una pequeña gira en el año 2007, que les llevaría a Guatemala, México, Argentina y Estados Unidos, además de a Valencia, Sevilla y, como no, Zaragoza. Como era de esperar, el apoyo fue masivo: tanto por los fans como por los medios. Se reeditó toda la obra del grupo de todas las formas posibles y se lanza un nuevo doble CD en directo que recoge temas de estos esperados conciertos: “Héroes del Silencio – Tour 07” (EMI, 2007).
LaFonoteca
Héroes del Silencio - Tesoro, El Último Silencio - 2007