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jueves, 2 de febrero de 2023

lunes, 1 de marzo de 2021

Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán 2016 - Señora Azul

Formato: FLAC 
Tamaño Rar: 299,85 MB 

    Grupo español de folk pop formado en Madrid el año 1974 integrado por Cánovas (nacido Juan Robles Cánovas en Madrid el año 1949, voz, batería, guitarra, percusión); Rodrigo (nacido Rodrigo García Blanca el año 1947 en Sevilla, voz, guitarra, teclados, flauta, violín, sintetizador, percusión); Adolfo (nacido Adolfo Rodríguez, voz, guitarra rítmica, percusión); Guzmán (nacido José María Guzmán el 29-2-1952 en Madrid, voz, bajo, guitarra, flauta , percusión). 

Tras la disolución del grupo Solera (que únicamente grabaron el Lp homónimo del año 1973) los hermanos Martín Fernández (José Antonio y Manuel) siguieron su carrera como dúo, grabando varios Lp's, mientras que Rodrigo y Guzmán buscan a gente para continuar con el proyecto. 

El line-up del grupo se completa con la llegada de Adolfo Rodríguez, antiguo componente de Los Íberos y Juan Cánovas, batería de la banda instrumental Franklin. Su nombre se inspira en el grupo estadounidense de folk-rock, Crosby, Stills, Nash & Young, con los que comparten afinidades musicales. 

En 1973, C.R.A.G. (acrónimo del nombre del grupo) publica su primer (y más exitoso LP) Señora azul. EL LP contiene cortes como Señora azul”, Linda prima, Sólo pienso en ti o Carrusel. 

A pesar del éxito que tuvo entre los críticos y demás artistas de la época, las ventas no acompañaron al cuarteto en este primer disco. En 1974 se separan y no se reunen de nuevo hasta principios de los 80.

 

miércoles, 30 de septiembre de 2020

Canovas, Rodrigo, Adolfo y Guzman 1985 - C.R.A.G.






Formato: FLAC
Tamaño Rar: 232,06 MB

Al año siguiente del lanzamiento de “Queridos Compañeros” (Polygram, 1984) y casi sin solución de continuidad, C.R.A.G. lanzan su tercer álbum “C.R.A.G. 1985” (Polygram, 1985) que a la postre sería el último con la formación original al completo. Su grabación fue más complicada ya que el cuarteto tuvo menos margen de maniobra debido a los cambios estructurales dentro del sello discográfico lo que lleva al grupo a grabar temas más estándar.

Su tercer álbum es claramente de carácter continuista, es decir que gustará a los que gustó su anterior trabajo y defraudará a los que se llevaron una desilusión. Contaron para su grabación con el ingeniero José Antonio Álvarez Alija, que había tocado las percusiones en el anterior trabajo. Además de José Antonio también pusieron su granito de arena gente como Eduardo Leiva con el piano, Tito Duarte, ex-componente de Barrabás, en las percusiones y compañeros de José María Guzmán en Cadillac como Daniel Jacques Louis y Javier de Juan.

En algunos temas de este álbum C.R.A.G. se posicionan sobre temas incómodos, e incluso polémicos, en su momento y aún ahora veinticinco años después, y no se cortan ni un pelo para cantar temas sobre la eutanasia como en “Elizabeth”, tema escrito por Cánovas, la homosexualidad como en “Nada que ocultar”, el único tema compuesto por Adolfo en solitario, o canciones contra el estilo de vida alienante y sumiso como son “Espejito mágico” o “Le recomiendo”, todo un alegato a favor de la libertad de la mujer.

Adolfo y Rodrigo recuperan para esta nueva etapa la figura del vividor, pero si en “Señora Azul” (Hispavox, 1974) era un niño de familia bien, aquí en “Rafa”·nos cuentan la historia de un peculiar personaje que “vive para sentir esa tierra ultramarina entre la cocaína y la piña con el ron”, al igual que también cantan a las siempre consabidas historias sobre relaciones como en “Necesito tenerte”, aunque en su mayoría son más de desamor o como ellos mismos cantan en “Igual que una noria”, tema escrito por Rodrigo García, “Escribo una canción por el recuerdo, de lo que pudo ser y nunca ha sido”.

Para acabar con esta nueva etapa, el álbum termina con “1985: los blues”, tema que no engaña ya que C.R.A.G. se marcan, precisamente, un blues.
 La Fonoteca

https://1fichier.com/?ca840df9gnouie7mwbfv

miércoles, 8 de julio de 2020

Cánovas, Rodrigo, Adolfo Y Guzmán 1984 - Queridos Compañeros






Formato: FLAC
Tamaño Rar: 249,07 MB

Toda una década tuvimos que esperar para que limasen las diferencias que existían entre los cuatro componentes de C.R.A.G., y para que Rodrigo García convenciera al resto de volver a meterse en un estudio para grabar nuevo material. Para ello contaron con el apoyo total de Gonzalo García Pelayo y colaborando en los arreglos a gente como José Torres o Alejandro Monroy. 

La primera pregunta, y la más obvia, es qué es lo que nos encontramos en este segundo álbum de C.R.A.G. Pues en cuanto a armonías vocales las siguen conservando como si el tiempo no se hubiera detenido jamás, lo podemos comprobar en “Estrella perdida”, único tema compuesto por José María Guzmán y que es de lo mejor del disco, o “Mi cama de bambú”, compuesto por el combo Adolfo Rodríguez y Rodrigo García que también escribieron para este disco “Corazón de tango”; pero en cuando a su sonido la cosa cambia.

En un giro discutible, C.R.A.G. actualizan su sonido acorde a los tiempos, el sonido del álbum es más ochentero acercándose al soft-rock, jugueteando con sintetizadores y usando vocoders, algo que para el arriba firmante considera que no era del todo necesario ya que uno de los puntos fuertes de “Señora Azul” (Hispavox, 1974) es precisamente su sonido atemporal. Aunque en realidad lo que más se echa de menos es ese punto de socarronería en las letras que podíamos encontrar en su álbum de debut.

Pero metámonos de lleno en el disco. En el álbum podemos diferenciar claramente dos partes, en la primera nos podemos encontrar a unos C.R.A.G. más clásicos, más de la vieja escuela, con canciones como “Paraíso de algodón”, tema compuesto por Cánovas y uno de los más destacables del disco, “De piel trigueña”, que abre el disco, y “Fines de enero”, que nos retrotrae a los inicios del rock’n’roll y que nos recuerda a gente como Jerry Lee Lewis o Carl Perkins, ambos obra de Rodrigo García.

En la segunda parte tenemos a los C.R.A.G. más ochenteros, donde se apoyan más en los teclados y sintetizadores, y entre los que destaca el tema “Queridos compañeros”, donde el cuarteto hace un repaso de los diez años que han pasado entre su primer disco y éste. Aunque las canciones más significativas de este nuevo sonido son “Sé tú” y “El laberinto” donde se atreven hasta con el uso del vocoder.

Para cerrar el disco nos encontramos con “Una gitana como tú”, canción con toques flamencos que la verdad es que no creo que sea el tema más adecuado para cerrar este disco ya que desentona bastante, pero como ellos mismos cantan “lo bueno que un día hicimos juntos, queridos compañeros, quedará”.
Lafonoteca